Sofia Padrón Quijano
Directora Global de Comunicaciones de Marketing.
Soy originaria de San Luis Potosí.
España para mí siempre representó un lugar liberador, boyante de sabiduría y cultura. Cuando llegué, corroboré esa idea del país, pero también encontré una diversidad enorme para un país tan pequeño (comparado con México). Encontré que la vida rural es y será el alma de esta tierra, descubrí que España es Folclore e innovación al mismo tiempo, y entendí que la identidad de los ciudadanos de este país no radica en símbolos patrios, sino en el orgullo de pertenecer a una tierra convulsa y diversa.
Mi mayor reto, por extraño que parezca, fue el lingüístico. Mi forma de hablar se entendía poco, pero además no había voluntad de entenderlo, así que me di a la tarea de ir adaptando mi forma de hablar, mi acento y vocabulario… Con el tiempo entendí que eso tiene un nombre: inmersión lingüística. Y aunque jamás he renegado de mi acento, admito que esta adaptación me ha facilitado mucho la vida.
En este país es donde mi carrera profesional ha despegado, y también esta experiencia me ha facilitado una reputación profesional en mi país de origen. Hoy hago balance de mi vida en España y me doy cuenta de que llevo más años como adulta viviendo aquí que en México, y eso me lleva a entender que mi alma está en México, pero mi cabeza en España, pues para mi presente y mi futuro veo con menos convulsión mi permanencia en este país que me ha regalado tanta vida.